22 julio, 2012

El día de la marmota, Harold Ramis (1993)


Te amo, te amo, una y otra vez te amo. 
Cada mañana al despertar, cada noche antes de ser testigo de la muerte de cada día. Y no hago más que esperar a que la eternidad proceda a suceder a tu lado, en un beso apasionado de reencuentro esperado. No sé cuántos años pasaron en el hechizo de Groundhog Day, tan sólo espero no tener que esperar tanto.

1 comentario:

Ariel dijo...

http://argie-mibosque.blogspot.com/2009/06/cada-marmota-le-llega-su-dia.html